miércoles, octubre 22, 2008

La fiesta de todos santos.

Dispensen, les voy a contar un cuento. hace tiempo en un día de Todos Santos, cuando vienen todos los difuntos-las ánimas-a visitarnos pueblo por pueblo, en todas las casas, un señor le dijo a su esposa:
-Yo no creo que vengan las ánimas de os difuntos. No lo creo. No vienen. Son solamente mentiras. Yo no tengo tiempo, así que voy a trabajar. Voy a esperar a mi papá con una jícara de enchiladas. El siempre comía ramas de wax tierno. Eso le voy a poner en el altar.
Así lo hizo, se fue a trabajar todo el día, en el mero festejo de Todos Santos -el día de los grandes, de los mayores, porque primero es el día de los chicos. Amaneció, se fue a trabajar y de pronto escuchó ruido de gente que platicaba en el camino. Pasaban muchos, iban contentos, unos cantando, otros bailando. Y vio que pasaban muchos,llevaban canastas en la cabeza y cargaban chiquihuites en el hombro. Todos llevaban racimos de plátanos, tamales grandes y chicos. Llevaban atole, lo cargaban en cántaros, lo llevaban en jarros. Otros, mazorcas en mancuernas. Todos iban contentos.
Entonces e3l señor pensó: " ya veo que esas no son gentes de verdad, porque no las conozco, van otros señores que hace años he visto. Pobre de mi papá". Pensó que venía su papá.
Al poco momento vio venir a su papá y a su mamá. Su padre llevaba al hombro la rama de wax tierno, como mesis. Su mamá llevaba en la cabeza una jícara de enchiladas, tapaditas, así como debe ser. Eso llevaban. El señor se entristeció.
- Ahora ya lo creo, todos los difuntos, todas las ánimas vienen -dijo.
Entonces el hombre los llamó y les dijo:
-Papá, papá, mamá, mamá. Quiero hablar con ustedes. Yo no creía. Dispénsenme. o no sabía que ustedes vienen a visitarme. Ahora veo que deveras es cierto. Hagan el favor de esperarme un poco. Voy a hacer también una ofrenda grande. Ahora ya sé que de veras vienen.
-Pero no podemos -contestó el papá- nosotros ya nos vamos. Pero si quieres verme y dejarme la ofrenda, hazla, te espero en el portal de la iglesia, allá te espero mañana, antes de que empiece la misa.
Bueno, entonces eso fue lo que hizo el señor. Regresó a su casa. Mató puerco, mató gallina. Hizo tamales grandes. Puso altar. Estuvo preparando la ofrenda toda la noche, para que cuando amaneciera, hacer el rosario, ir a rezarle a las ánimas de sus papás.
En el momento en que terminó sus quehaceres, sintió un gran cansancio. Le dijo a s esposa:
-Voy a descansar. Así, tan pronto como estén ya cocidos los tamales, pruébalos y avísame. Cuando termines, despiértame para ir a llamar al rezandero, vamos a rezarles. Voy a ir a dejar la ofrenda allá donde va a esperar mi papá.
Y el hombre se fue a descansar a su cama. Como a la hora le fueron a hablar, pero el hombre ya no estaba con vida. Estaba muerto. Murió en su cama.
Cuando la señora vio finado a su esposo, avisó a los vecinos, a los familiares. Los tamales, la ofrenda que hicieron para su papá se la comieron los que ayudaron a enterrar al difunto. Así termina este cuento. Gracias.
Martín Hernández Guadalupe.
Recopilación: Angela Ochoa.
Relatos Huastecos. De la serie Lenguas de México. Número 4.
Este relato lo escuché en la huasteca hidalguense en mi infancia y adolescencia, ahora que lo encuentro en el libro que cité, me doy cuenta de que es un cuento muy difundido en las huastecas y que regula el costumbre, la importancia de hacer altar y ofrendar generosamente a nuestros ancestros. La desobediencia se paga con la misma vida.

3 comentarios:

ka! dijo...

Buen recordatorio de los deberes todavia por hacer en estos dias.

Anónimo dijo...

Es un relato muy bello y harto significante... jamás olvidar la memoria de quienes forjaron lo que somos... olvidar es morir. Abrazotes!!!

Dana M. McIntosh dijo...

He sido VIH positivo durante 6 años y mucho tiempo para el día de estar libre de esta enfermedad. Me encantaría ser parte de cualquier juicio que ayudó a encontrar la cura, tengo una carga viral indetectable y recuento de CD4 de alrededor de 1.100.
He intentado casi todo, pero no pude encontrar ninguna solución a mi enfermedad, a pesar de todo esto que me pasa, siempre me paso mucho para comprar unos medicamentos contra el VIH del hospital y tomar algunas varios medicamentos, pero no releva, hasta que un día yo estaba sólo la navegación en Internet, cuando me encontré con un gran puesto de! Michelle! que de verdad dijo que fue sido diagnosticar con el VIH y se curó aquella misma semana a través de la ayuda de este gran médico potente hechizo de curación, me pregunto por qué se llama el gran doctor, Odia, yo nunca supe que era todo por el bien y obra perfecta que él ha estado haciendo que está causando todo esto. así que rápidamente en contacto con él, y me pregunto algunas pocas preguntas y así lo hice todas las cosas que él me pidió que hiciera, me pregunto para comprar algunas hierbas y que yo hice para mi cura, sólo para ver que en el mismo día en el que Dijo que yo quedaré sana, toda la fuerza que me ha dejado antes de lanzas de nuevo y me hace muy fuerte y saludable, esta enfermedad mata casi mi vida todo por mí, así que me fui al hospital para dar la prueba final de la enfermedad y el médico dijo que soy VIH negativo, estoy muy sorprendido y feliz por el médico de curación Odia dio a mí desde la parte antigua de África, usted puede email él ahora para su propia curación demasiado en su correo electrónico: (drodiaherbalistcenter@gmail.com) o llamarlo por +2348141195952, ................... Doy gracias Dr, Odia.