miércoles, mayo 07, 2008

Sálix Babilónica o de cómo la selva de la huasteca hidalguense llegó a Tampico.

Con retraso, el evento inició casi una hora después de lo previsto, sentado en una banca en el corredor de la Casa de la Cultura de Tampico tomaba la fresca brisa que se levantaba desde la desmebocadura del río Tamesí. Uno a uno fueron llegando técnicos, conserjes y chalanes para terminar el montaje de los cuadros que en pocos minutos serían dados a conocer a los curiosos, a los especialistas y a los mirones que nos fuimos conglomerando aguardando el momento de la inaguración.
Carluz Sáenz descendió de una camioneta acompañado de otro creador cuya cara me es familiar pero con quien nunca he mediado palabra. Me sonrió con la sencilléz de su morral cruzando por su pecho, como sus pasos que cruzaron el lobby para extenderme su mano y mostrarme su perfecta dentadura.
Otros carros como en una caravana dispar fueron depositando personajes en aquella casa estilo neoclásica acondicionada como galería, cineclub y bodega. Una maestra con entusiasmo me gritó apresurando el paso: "¿quién mas viene?". Sonriendo mostré mi ignorancia y la vi alejarse en un tumulto momentáneo.
Gustavo Zamarripa (dueño de la única galería en Huejutla, llamada Mallinalli) con visible nerviosismo empuñó un micrófono a su boca, parecido a una enorme paleta tootsie-pop. Endulzando las palabras nos habló de la plástica figurativa de ese grupo de creadores a quienes logró congregar, de los motivos costumbristas y paisajistas que encontraríamos en los cuadros, de la nula academia que muchos de ellos están careciendo pero de el auténtico compromiso autodidacta de su vocación plástica.
Adentro escenas cotidianas de los suelos huastecos eran encapsuladas en trazos y pinceladas, de acrílicos y óleos figuraban los rostros desproporcionados del músico, del niño volando papalotes, de los danzantes cayendo de bruces desde lo alto de un palo, desplomándose como los rayos del mítico sol padre, el músico ejecutando un violín y en nuestras mentes resonaba un huapango olvidado.
Sin menospreciar el trabajo y el tesón de los artistas plásticos convocados, el trabajo de Carluz Sáenz sedujo a muchos, el manejo de la luz en sus paisajes logra una definición y una limpieza que le da a uno la sensación de claridad interior, el paisaje salta del lienzo y se extiende en nuestro interior, ahí las raíces de la Ceiba se nutren de nuestra sangre no como un parásito, sino como una extensión orgánica del yo. Los elogios se sucedieron uno tras otro.
Efrén Fayad también gustó, en sus cuadros no puede negar su vena musical, la enseñanza de los viejos, de los hombres de años, que con paciencia le han revelado los secretos del violín, no'mas afinando el oído, por puro gusto pues, como lo dicta "el" costumbre. Pintura costumbrista coherente con su formación artística y hombre del pueblo.
La muestra incluye una selección de máscaras tradicionales xantoleras (de día de muertos) y tallas en madera, que representan escenas del diario vivir y la imaginación del artista huasteco.
Esta es la primera incursión de hombres sencillos, de campo, cuyo trabajo, constancia, paciencia y talento ha emergido de entre la selva para meterse en los ojos de una mirada dispuesta a dejarse seducir por los colores de una huasteca mítica que dormita entre ríos, ceibas y framboyanes.

Con una copa del tradicional curadito de jobo nos bebimos la expocisión, quemando las tripas cual calor veraniego de ese pedazito de paraíso que es mi terruño.

3 comentarios:

Margarida V dijo...

me encantaria poder conocer tu pais con todas sus tradiciones.

Ronnie Valencia dijo...

aaa mi hermano que rica lectura me acabo de beber, imaginandome esa amplia gama de texturas con que cuenta la huasteca me considero mal afortunado al perderme tan fascinante colectiva plastica de tus paisanos... Encantado hubiese estado tan siquiera de haber asistido... Las distancias nos cortan la respiracion lo sabes, ahora aqui la vida cultural es nula, mas sin embargo algun proyecto tengo en mente para poder dar un brio nuebo y respirable a este padecimiento citadino...

Hermano, el trabajo aun esta esquivo, no encuentro lo justo y exacti que se esconde para mi persona, aunuqe he pensado en emigrar solo hacia monterrey o matamoros de noser que no encuentre nada....

el amor aun permanece aqui a mi lado de echo te manda un ronquido de saludo, pues a estas horas el esta durmiendo y yo metido en este espacio con los ojos ya calados por el brillo...

amigo hermano, te extraño !! te mando un fuerte abrazo, sabes que te quiero mucho y que me da gusto saber que has encontrado una infinita mirada camaleonica que llene el alma... Si, aun tienes alma...

Bexos y abraxos mi buen

cuidate

au revoir

Panchalli dijo...

he he la semana pasada fui a la exposicion ... jaja nunc nos encontramos que mal
saludos!