martes, enero 31, 2006

EL CRUCIFICADO.

CARLOS SOLÓRZANO


(Farsa trágica)


La acción, un Viernes Santo en una población donde se escenifica todos los años, por esas fechas, la pasión de Cristo.


Pesonajes:
JESÚS, hombre del pueblo de 30 años. Débil, Aspecto febril, rasgos indígenas.
MARÍA, madre de Jesús. Vieja del pueblo.
MAGDALENA, muchacha del pueblo, morena, rolliza.
CUATRO HOMBRES QUE CARACTERIZAN A LOS CUATRO APÓSTOLES.
EL SEÑOR CURA.
HOMBRES Y MUJERES DEL PUEBLO.
En el interior de una choza: Paredes ahumadas, piso de tierra. En un rincón, la lumbre. A la izquierda, en primer término, una pequeña puerta que comunica con la otra habitación de la choza. Al fondo una puerta de dos hojas abiertas, por la que se ven los campos azules confundiéndose con el cielo.
Dos hombres y dos mujeres del pueblo vestidos a la usanza mexicana están en escena arreglando diversos objetos. Sobre una silla se ve una túnica de raso ("lustrina") morada. Sobre la mesa una corona de espinas. Apoyada contra la pared, una gran cruz de madera rústica.
ESCENA PRIMERA
Hombre 1o.
Todo está listo.
Hombre 2o., con alegría:
Sí, todo. Yo mismo ensamblé esos dos troncos para hacer la cruz. (La acaricia.) ¡Quedó bonita! ¿No?
MUJER 1a.
Yo cosí la túnica morada.
MUJER 2a
Y yo enredé la corona de espinas cuidando de no lastimarme las manos.
(Por la izquierda entra Jesús, cabizbajo. Va vestido como campesino pero lleva ya puestas la peluca ondulada y las barbas de Cristo.)
MUJER 1a
¿Qué pasa, Jesús? ¡Estarás contento!...
JESÚS, con voz sorda:
Sí.
HOMBRE 1o.
Cualquiera diría que estás triste. No has querido ni siquiera probarte la túnica...
JESÚS
Hay tiempo.
MUJER 1a.
Unos pocos minutos. Dentro de un rato van a venir a venir a buscarte. ¿Qué tienes? Parece que te ha dado un escalofrío.
JESÚS, ausente:
No lo he notado.
MUJER 2a.
No es raro. Después de todo van a crucificarlo. (Ríe a carcajadas, pero su risa se crispa al ver a Jesús.)
JESÚS, intenso:
Sí, van a crucificarme.
MUJER 2a.
Tienes suerte. El señor Cura te escogió a ti y escogió a tu familia para representar la Pasión porque dice que te pareces al verdadero Jesús. Después de esto, todos te van a querer más en el pueblo. Bueno, los hombres de la familia de tu madre han hecho siempre el papel de Cristo. ¿Te acuerdas de tu tu abuelo? Se llamaba también Jesús. (Supersticiosa.) Murió pocos día después de haber hecho el papel. (Ríe forzada.) Fue una casualidad, ¿verdad?
JESÚS
Cállate.
MUJER 1a.
¿Qué tienes?
JESÚS, tímido:
Tengo miedo de morirme.
HOMBRE 1o.
Cristo también tenía miedo de morirse. Por eso fue tan triste la cosa.
HOMBRE 2o.
Pero a tí no van a matarte, hombre.
JESÚS
¿Y si es necesario?
HOMBRE 2o.
¿Necesario?
JESÚS
Sí, para salvarse ellos.
HOMBRE 1o.
¿Salvarse? ¿De qué?
JESÚS
El señor Cura dice que tienen que salvarse de algo.
HOMBRE 1o.
Nadie se ha salvado de nada por matar a un hombre. Tranquilízate.
HOMBRE 2o.
El señor Cura dice que sólo con un sacrificio podrán limpiarse de todos sus pecados . Sobre todo del pecado original.
HOMBRE 1o.
¿Qué es eso?
HOMBRE 2o.
No sé. Creo que es una manera de decir que es triste haber nacido y tener que morirse.
JESÚS
No, es que pecamos con sólo haber nacido.
HOMBRE 1o.
Pues mira éste... Yo no pequé. Yo nací nada más. No pedí nacer. Valiente cosa: hacernos nacer en esta tierra sin árboles donde el sol le seca a uno las entrañas, y lo deja hecho cenizas.
(Se oye un griterío lejano.)
JESÚS, con calma:
Van a venir a buscarme. Vienen porque quieren que me sacrifique.
HOMBRE 1o.
No van a hacerte nada. Unos cuántos azotes nada más...
MUJER 1a.
esos azotes van a hacer que todos te respeten después.
MUJER 2a.
y te valdrán entrar en el reino de los cielos.
JESÚS
¿Y si me crucifican?
MUJER 1a.
no digas cosas sin sentido.
JESÚS, sin oír:
si me crucifican... ¡cuando la cruz está tan cerca es casi una tentación!
HOMBRE 1o.
Pero si sólo vámos a divertirnos un rato. Los hombres necesitamos a veces estas celebraciones: Rezar un poco, emborracharnos otro poco al mismo tiempo. Tú también vas a divertirte. Verás. Ni vas a sentir el peso de la cruz cuando estés borracho caminando entre los gritos de todos.
HOMBRE 20. Claro. además no tienes por qué tener miedo. No eres un Salvador de verdad. Eres un hombre como todos nosotros.
MUJER 1a.
es que ya se posesionó de su papel.
HOMBRE 1o.
¿Qué papel?
MUJER 2a.
el de crucificado.
HOMBRE 1o., riéndo a carcajadas:
ah qué Chucho éste... No estarás creyendo esa locura de que vas a un sacrificio... vas a una diversión. todos vamos a una fiesta, a un carnaval. ¿no es verdad?
JESÚS, viendo a la puerta del fondo retrocede:
Ahí vienen...

(En la puerta han aparecido cuatro hombres el pueblo, tipos muy indígenas, vestidos con los trajes usuales de la Pasión, hechos también en "lustrina" con galones de papel dorado. Por debajo de las túnicas que les quedan cortas se les ven los pantalones y los zapatos viejos. Llevan las pelucas torcidas, los mantos mal prendidos.)

MUJER 1a., con asombro:
¡Los apóstoles!
UN APOSTOL
¿Dónde está Chucho?
PEDRO
¿Dónde está Jesús?
MUJER 1a., a la mujer 2a.:
Ése es San Pedro.
PEDRO:
¿Dónde está el Maestro?
JESÚS, teatral:
Aquí estoy. (Los Apóstoles se hincan delante de él, uno de ellos rueda por el suelo enmedio de las carcajadas de los demás.)
PEDRO
Levántenlo.
MUJER 1a.
Ése que cayó es San Mateo.
JESÚS
¿Qué tiene?
PEDRO
Está borracho.
MATEO, levantándose:
Todos estamos borrahos.
PEDRO
Sí. Todos estamos borrachos. Y tú Jesús, tienes que emborracharte también.
JESUS
No. Yo sé que al final de toda borrachera hay siempre un crucificado.
MATEO, ofreciéndole una botella:
Bebe. Bebe ¿O no eres hombre?
JUAN, interrumpiéndose:
Demuéstrales que eres tan hombre como ellos.
MARCOS
Más hombre todavía. Más que hombre.
MATEO
Bebe, Jesús, bebe. Sin borrachera no hay nada que valga la pena de vivirse. Ni el sacrificio ¿eh? (Ríe, limpiándose la baba de la embriaguéz.)
(Alarga la botelal a Jesús. Éste la toma, vacila. Todos lo ven. De pronto con gesto decidido bebe largamenbte de la botella... Sr limpian la boca, adopta un aire solemne, se sube sobre la mesa y desde allí con aire teatral habla:)
JESÚS
¡Amaos los unos a los otros!
MATEO
¿Qué dice Chucho?
(Marcos forcejea con Pedro por la posesión de la botella.)
MARCOS
Dame esa botella.
JESÚS
He dicho. ¡Amaos los unos a los otros!
MATEO, viéndolo extrañado:
¿Por qué?
JESÚS
Porque es bueno.
MATEO
¿Quién lo dice?
JESÚS
Yo.
MATEO
¿Y quién eres tú? Un pobre disfrazado de Mesías. Ni te creas que te vayamos a tomar nunca en serio.
(Le vuelve la espalda.)
JESÚS
Óyeme...
MATEO, bebiendo:
Te oiré cuando esté más mareado, para no abnurrirme. (Le alarga otra vez la botella.) Bebe otra vez. (Jesús vacila.) Díganle que beba, si no, no va a aguantar con la cruz, ni con los gritos de esos que lo van a esperar allí afuera, ni con los azotes. Nadie aguanta todo eso si no está mareado.
PEDRO, al ver la expresión de angustia de Jesús:
No tengas miedo. Después de esto vas a ser para todos algo milagroso; te van a sacar fotografías, te van a encender velas...
JESÚS
¿Y si me hacen daño? ¿Y si me matan?
PEDRO, riéndo:
¡Queda el consuelo de la resurrección!
JESÚS, vacilante:
La resurrección... Dame de beber. (Bebe otra vez, el licor le cae de la boca por lo lados de la botella. Intenta mantenerse en pie pero está mareado. Cae sentado sobre una silla.)
MUJER 1a., a la mujer 2a.:
¡Ahora! Ahora hay que ponerle la túnica y la corona.
(Las dos mujeres se acercan a Jesús, y sin que éste oponga resistencia le meten la túnica por la cabeza, la atan a la cintura, le colocan la corona de espinas en la cabeza, le arreglan la peluca. En la sombra la ilusión será perfecta. Parecerá un Cristo de Iglesia de cualquier pueblo, muy morenop, con los ojos brillantes y las dos manos colgando con laxitud a los lados del cuerpo. Al verlo, las dos mujeres se hincan frente a él. La luz del hogar, detrás, dará una claridad irreal.)
MUJER 1a., hincada:
Padre Nuestro que estás en los Cielos, santificado sea tu nombre, el pan nuestro de cada día dánosle hoy...
MUJER 2a.
Perdónanos nuestras deudas así como nosotros perdonamos a nuestros deudores... (El rezo se va apagando.)
JESÚS
¿Qué hacen estas mujeres?
PEDRO, muy natural:
Te rezan.
JESÚS, asombrado:
¿Ya? Pero si todavía no me han crucificado. (Medita.) ¿O será que de veras yo soy el Salvador?
MATEO, dándole una violenta palmada en la espalda que lo hace vacilar:
Claro hombre. Claro. Eres el Salvador. Bebe más y te sentirás el hijo de todos los dioses de la tierra.
(Jesús toma la botella, bebe, se pone de pie violentamente por lo cual las mujeres hincadas ruedan por el suielo.)
JESÚS, con el brillo de la embriaguéz en la mirada:
Soy el hijo de Dios.
MATEO, riendo a carcajadas:
Claro. Dicen que todos somos hijos de Dios, pero si quieres, tú eres más hijo de Dios que nosotros.
JESÚS, siguiendo el curso de su embriaguéz:
Y aunque tenga mniedo, está escrito que tengo que morir por ellos. (Señala en derredor.)
MATEO
Todos tenemos que morir, pero morimos por nada. (Bebe más.)
PEDRO
Basta ya. Ya no beban. No vamos a saber lo que hacemos. Jesús no va a poder con la cruz.
MATEO
Lo ayudaremos con la cruz. Ahora y siempre. Si él no está borracho nadie va a creer nada. Ante todo es necesario que los actores crean también. (Los apóstoles beben, Jesús bebe, los hombres beben. Las mujeres los ven sin comprender.)
MUJER1a.
Jesús. Allí está tu madre.
MUJER 2a.
María, María. Qué bueno que llegaste. Ven a poner orden aquí.
(Aparece en le umbral María. Es vieja, desgarbada. Viste la túnica y el manto de la Virgen. Lleva en la cabeza una "aureola" que está a punto de caerse todo el tiempo.)
MARÍA
¿Qué pasa?
MUJER 1a.
Están borrachos. Todos borrachos.
MARÍA
¿También Jesús?
MUJER 1a.
Es el peor de todos. Dice cosas muy raras.
MARÍA, a Jesús:
Hijo...
JESÚS
Mujer (señala a Juan.) He allí a tu hijo...
MARÍA, indignada:
¿Tan borracho estás que no reconoces a tu madre?
JESÚS
No tengo madre. Sólo padre. Eso sí (Ve a lo alto.)
MUJER 1a.
Qué insolencia.
MARÍA
Mejor no hables de tu padre, porque tú mismo no sabes quién fue.
(Carcajadas de todos.)

JESÚS, sin oír:
Escrito está. El hijo del hombre dará su sangre para lavar al mundo de todos sus pecados.
MARÍA, sacudiéndole fuertemente:
Hijo, vuelve en ti. No digas locuras.
JESÚS, ebrio:
¿Recuerdas que aquí había un solo pan? Ahora hay muchos (triunfante.) Mi poder los ha multiplicado.
MARÍA
Pero si yo misma compré esos panes hoy en la mañana.
JESÚS
¿No me crees? Mujer incrédula. (A los apóstoles.) ¿No es verdad que dí la vista a un ciego, que hice hablar a los mudos? (Alza un puño amenazante.) ¿No es verdad? (Pedro hace una señal a los otros para que sigan la corriente de la borrachera de Jesús.)
PEDRO, con fastidio:
Sí, Jesús, sí.
JESÚS
¿Y que he devuelto la vida a los muertos?
APÓSTOLES, complacientes:
Pues...sí.
JESÚS
¿Y que debo sacrificarme por todo?
MATEO
Sí, hombre, sí. Ya no fastidies.
JESÚS, transfigurado:
Amaos los unos a los otros.
MARÍA
¿Qué es esto, hijo? Mañana debes estar bueno y sano para cuidar las siembras. Yo necesito de ti. Después de esta borrachera te puede venior una enfermedad grave. No me gusta verte borracho. (Se quita el resplandor.) Lo mejor será que les digas a todos que se vayan y que ya no hacemos la Pasión.
JESÚS
¿Quieres desviarme de mi misióm por cosas tan pequeñas, como las siembras?
MARÍA
¿Qué dices? Las siembras son las que nos dan para vivir. ¿Qué haríamos sin ellas? Tú con todas tus palabras y locuras no podrás darnos de comer si no hay siembras. Despierta ya y piensa en que eres un pobre muchacho, hijo de una mujer sola, que tiene que ganarse el pan de todos los días.
JESÚS
Atesorad tesoros en el reino de los cielos.
MARÍA
¡No vas a darnos de comer con esa frase! ¿Verdad?
MUJER 1a.
Tienes razón. Regáñalo. A los hombres siempre les gusta creerse más de lo que son.
JESÚS, teatral:
Yo soy la verdad y la vida.
MARÍA
No, lo que eres, es un chiflado que quiere arreglarlo todo con palabras. (De pronto tierna.) Serénate hijo. ¿Por qué no tomas algo para que se te pase la borrachera?
(Aparece en la puerta Magdalena. Lleva los cabellos sueltos y viste también ropas adecuadas a la Pasión. Los vestidos se pegan a su cuerpo dejando ver sin disimulo sus formas redondas, llenas y apetecibles.)
MAGDALENA
Tu madre tiene razón, Jesús.
JESÚS
Magdalena. Magdalena, chula. (La abraza, luego se reprime.) ¿Pero qué estoy haciendo? Esto es pecado.
MAGDALENA
¡Estás borracho! ¡Será mejor que ya no hagamos la Pasión. Estando tú en ese estado...
MATEO
Te equivocas, Magdalena. Sólo estando Jesús borracho podremos llevar esto hasta el fin.
JESÚS, en éxtasis:
Está escrito. Tendré que morir para resucitar de entre los muertos.
MARÍA, a Magdalena:
Tengo miedo, tú que vas a ser su mujer debes decirle que no salga en ese estado. Oye a los de afuera. Están borrachos también. (Se oye fuera de la escena un griterío de los que celebran la Semana Santa.)
MAGDALENA
Jesús. No vayas a salir así. Tengo miedo de esta borrachera. De la tuya y de la de esos de allí afuera.
JESÚS
Esta escrito que debio ir.
MAGDALENA
¿Escrito? ¿Dónde?
JESÚS, perplejo:
Púes... no sé, pero está escrito.
MAGDALENA
No vayas. Piensa que si algo te pasara ahora que voy a ser tu mujer... (se acerca.) Sólo en eso debes pensar ahora. Tú y yo juntos... Ahora va a comenzar de veras la vida.
JESÚS
La vida comenzará cuando yo muera y vuelva de entre los muertos.
MAGDALENA:
No digas más disparates. Si tú y yo vamos a vivir juntos...
JESÚS, interrumpiendo:
Eso no importa.
MAGDALENA
¿Qué dices? Pero si eso es lo único que importa. (Aparece en la puerta el señor Cura. Entra dando vivas muestras de satisfacción.)
CURA
¿Está todo listo? El pueblo está desbordante de entusiasmo. Quieren ver a Jesús.
MAGDALENA
Jesús no va (Cierra la puerta.)
CURA
Abre la púerta. Es necesario que vaya.
MARÍA, con angustia:
¿Por qué?
CURA
Para que el pueblo crea, debe verlo.
MARÍA
Oiga los gritos. Van a lastimarlo.
CURA
Esto no es sino una representación.
MARÍA
Pero pueden matarlo.
CURA
Nadie muere en un carnaval.
MARÍA
¿Y Jesús? ¿El otro? ¿Su abuelo?
CURA
Abre la puerta he dicho. Él tiene obligación de salir. Hará bien su papel.
MARÍA
Y esos de afuera. ¿No se olvidarán de que sólo se trata de un papel?
CURA
Ellos lo verán y creerán.
MARÍA
¿En qué?
CURA
En lo que es necesario que crean.
MARÍA
No comprendo.
CURA
No es necesario comprender. Sólo creer. Ahora vámos. (Hace señas a los Apóstoles.) Los Apóstoles aquí a la derecha, formando fila. María, San Juan y tú Magdalena aquí atrás y tú Jesús prepárate, ya es la hora de cargar la cruz. (Todos obedecen enmedio de risas y bromas.)
JESÚS
No puedo. Está muy pesada.
(Como las risas continúan, el Cura se encara con todos muy serio:)
CURA
Silencio. A partir de ahora no quiero ni una risa. (Todos se callan. El Cura abre la puerta y se oye un gran griterío.)
CURA, a Jesús:
Después de esto te voy a dar una cruz de plata como premio.
MARÍA, en un último intento:
¿Y si no fuera, padre?
CURA
Todos dejarían de creer en Jesús.
MARÍA
¿En cuál Jesús? ¿En Chucho?
MAGDALENA
Yo creo en Chucho. Yo, creo en él. (Quiere abrazarlo, pero Jesús la retira.)
CURA
Vámos, he dicho.
(Jesús con la mirada brillante de la embriaguéz se mete debajo de la cruz que sostienen los dos hombres del pueblo. Bebe por última vez con gran satisfacción, luego se yergue sosteniendo él solo la cruz.)
JESÚS
Yo soy el el Salvador. Será un día glorioso. Como si algo comenzara... (Se le escapa un hipo. Luego ríe con risa blanca, tonta, ausente.)
MAGDALENA
Ojalá no sea lo contrario: que algo vaya a terminar.
(El Cura va pordenando el desfile. los Apóstoles inician la marcha. Detrás de ellos sale Jesús dando traspiés. Luego, María, Magdalena y San Juan. Al ir saliendo la procesión estalla fuera de la choiza un griterío cerrado, luego ruido de cohetes, rechiflas, aplausops, mezclados con la música de una banda que toca un pasodoble desafinado y llorón. Detrás de todos sale el Cura repartiendo bendic iones. Lla luz se va apagando poco a poco hasta llegar a la absoluta
OSCURIDAD.)

ESCENA SEGUNDA

Cuando la luz vuelve están los doce Apóstoles en escena. Ha caído la tarde. Se oye uno y otro grito perdido, o el estallido triste de un cohete lejano... Los Apóstoles se han quitado las pelucas. Alguno tiene sólo la barba, otro se ha recogido la túnica dejando al descubierto el pantalón remendado y sucio.

PEDRO:
¡Es increíble!
MATEO
¿Qué vamos a hacer ahora?
JUAN
No fue culpa nuestra. Si estos borrachos crucificaron de verdad a Jesús fue porque él en su borrachera les gritaba: Soy el Salvador. Clávenme. Clávenme.
PEDRO
Yo no me acuerdo de nada. Estaba perdido de borracho. (A Juan). Pero tú podías haberlo impedido.
JUAN
Sí, quise impedirlo pero no me dejaron; mientras un hombre azotaba a Jesús, él le gritaba feliz: Pégame más fuerte, más fuerte, y luego venía otro y otro y todos lo azotaban. Cuando vi que iban a clavarlo de vrdad les grité: Deténganse; pero todos gritaban y gritaban, el señor Cura ya se había ido a la iglesia y Jesús les repetía frenético: Está escrito, mátenme, mátenme. Después, lo único que pude hacer fue llevarle una última copa cuando ya estaba clavado pero él repetía como loco: Tengo sed, tengo sed...
PEDRO
Todos teníamos sed. Era la borrachera. ¿Por qué no dices nada, Marcos?
MARCOS, pensativo:
Algo grave va a suceder. Nos van a echar la culpa a nosotros. Aquí, entre todos lo embriagamos y lo mandamos a su sacrificio. Mateo era el peor, le decía todo el tiempo: Tú eres el Salvador, tú eres el Salvador y dale con eso toda la tarde.
MATEO
Yo no recuerdo nada.
JUAN
Yo tampoco.
MARCOS
Pero el pobre se lo creyó y se murió.
JUAN
Nadie va a saber quién lo mató. Lo mataron todos pero no lo mató ninguno. Nadie es culpable.
PEDRO
Pero Marcos tiene razón. Nos echarán la culpa a nosotros. Sobre todo a Mateo, a Marcos y a Juan.
MARCOS
El culpable realmente fue él mismo. Desde que salió el dsfile de aquí iba gritando y pataleando, reclamando su sacrificio. Cuando se pide que lo maten a uno, no hay que quejarse después.
JUAN
Es que Chucho era distinto.
MARCOS
¿Distinto?
JUAN
Sí. Había en él algo que los demás no tenemos.
MARCOS
Bah! Eso lo dices porque lo crucificaron. Si no... sería uno de tantos.
JUAN
¿No será porque había en él algo del espíritu del Salvador?
MATEO
¿Qué dices?
JUAN
He oído al señor Cura. Eso puede suceder; que el espíritu del Salvador...
MATEO, tronándose los dedos:
Tengo una buena idea.
JUAN
¿Cuál?
MATEO
Diremo que fue un milagro. Que Jesús era una especie de Salvador y que su muerte era necesaria.
MARCOS
No está mal. Además, los de la Justicia no nos podrán, entonces, culpar de nada.
PEDRO, radiante:
Es una gran idea.
MATEO
¿Y si no nos creen?
PEDRO
Somo cuatro. Y si cuatro hombres se proponen repetir la misma cosa a todas horas, todos temonan por creerlos. (Les guiña el ojo.)
MARCOS
Es verdad, Juraremos aquí mismo que Jesús era el Salvador.

(Los cuatro hombres pondrán sus manos una encia de la otra en un mismo punto.)

APÓSTOLES, en coro:
Jesús era el Salvador, Jesús era el Salvador, Jesús era el Salvador.
JUAN
Hay una cosa... Si nos pregunyan: salvador de qué, ¿qué les diremos?
PEDRO:
No sé. De cualquier cosa. Eso no tiene importancia. Miraremos a lo alto sin contestar y con eso será bastante.
MATEO
Está bien. Ahora hay que separarse. Los de la Justicia van a investigar. Hay que esconderse. Y algún día quizás de esto puede resultar algo importante... Nunca se sabe...
JUAN
No comprendo.
MATEO
Sí, hombre, algo provechoso...
JUAN
¿Para quién?
MATEO
Para nosotros, hombre. Para nosotros.
PEDRO
Ahora vamos, y no olviden (hace la señal. Los Apóstoles vuelven a repetir en coro:)
APÓSTOLES
Jesús era el salvador. (Se saludan y después de otear prudentemente la entrada van saliendo todos en diferentes direcciones repitiendo: Jesús era el Salvador. Al irse los Apóstoles aparecen por la pequeña puerta de la izquierda, María y Magdalena. Ya no llevan los trajes de la Pasión y sus vestidos se ven muy sucios y pobres.




ESCENA TERCERA
(María se apoya en el brazo de Magdalena y llora silenciosa sin poder hablar.)
MAGDALENA
Llore. No le queda otro remedio. Pero el verdadero culpable fue él. Él se fué, pasó de la embriaguez a la muerte sin sentirlo y nos deja aquí solas, pobres, hambrientas, olvidadas (Ahoga un sollozo, luego reacciona con ira.) El pobre estaría pensando que con su muerte, íbamos a ganar algo... (María esconde la cara en el pecho de Magdalena. Esta pasa su mano por la cabeza de María con dolorosa piedad, mientras va corriéndose muy lento el
TELÓN.)

jueves, enero 26, 2006

Martes 24 de enero de 2006.

Las salas de Contempo Cinema y el Centro Cultural Helénico, sedes del encuentro.

España, invitada del Festival Internacional de Cine y Teatro Gay de México, que comienza hoy.

Serán proyectadas cintas como Saving face, The garden y Yesterday, además de documentales sobre sida Bajo el silencio y Pazword, entre las obras de teatro .


ARTURO CRUZ BARCENAS

Hoy comienza el Festival Internacional de Cine y Teatro Gay de México (FICTGAY), que se realizará en las salas de Comtempo Cinema y en el Centro Cultural Helénico, cuyo fin es promover las nuevas propuestas en estas dos vertientes del arte, "las más actuales", hasta el 29 de enero. El país invitado es España.

Se presentarán varios programas mexicanos de cortometrajes y documentales en torno de la temática gay; uno de ellos es la Mostra Lambda de Barcelona, ya de reconocimiento internacional. Aunado a esto habrá mesas redondas, homenajes y retrospectivas.

Entre las películas se encuentran Saving face, de Alice Wu, y The garden, de Derek Jarman, así como Yesterday, El show del Terro de Rocky y 29th and Gay, además de documentales sobre el sida.

En el programa de teatro se encuentran Bajo el silencio, de Oscar Liera; Pazword, de Juan Ríos: Dj Rapidita González y sus historias de desencanto; De amor y de muerte, de Iker Arce, además de una maratón teatral y la conferencia Lo gay en México en 35 mm, entre otros.

Joaquín Rodríguez, especialista de cine y actor, expuso que desde que se fundó Contempo Cinema (ubicado en la Zona Rosa), el espacio "se conformó como una alternativa ante los grandes complejos que invaden todos los espacios, algunos de los cuales han ido desapareciendo.

"Quedan pocos espacios alternativos, además de que este tipo de cine no tiene necesariamente que ver con el estreno de la semana de Blockbuster. Como alternativas que quedan están los cineclubes, las salas de la UNAM, la Cineteca Nacional. Contempo Cinema, en un principio, tuvo una orientación hacia el cine erótico, pero pronto encontró eco en una audiencia específica, que es la comunidad gay".

Jorge Novo, director de Contempo Cinema, señaló que las salas a su cargo se abrieron hace 18 meses. "Nos hicieron muchas preguntas, de si esto iba a ser de cine porno; descubrieron que no. Desde septiembre de 2005, cuando proyectamos Mil nubes de paz, con temática gay, observamos un cambio notorio.
"Tengo 20 años dedicados a la distribución de cine y no sabía qué pasaba. Alguien me dijo: 'checa dónde está el cine': la Zona Rosa, donde la comunidad gay ha encontrado un espacio. Desde entonces comenzamos a programar más títulos de cine gay y ha sido bueno el resultado.

"Hay quienes se espantan, pero cuando ven la película se dan cuenta de que no hay por qué escandalizarse. No puedo decir que sea un cine como cualquier otro. Pasamos de lo erótico a lo gay y algunas producciones somos los únicos que las programamos. Haremos el festival y después seguiremos con lo gay."

Reconoció que no pueden competir contra "los monstruos; es decir, los complejos comerciales como Cinemex, pero sí podemos ofrecer películas exclusivas. Vamos a festivales internacionales y de ahí nos proveemos. No es cine de arte, pues no estoy de acuerdo con esa etiqueta".

Añadió que el festival que hoy comienza ayudará a crear un público que lo sostendrá con su asistencia a las salas.

Alberto Legorreta, uno de los organizadores, expresó que como precedente del festival se puede citar el Mix, "de mérito loable que comenzó hace 10 años; José María Covarrubias, ya fallecido, era su organizador y creó la Semana Cultural Gay. El nuestro no es único, pero queremos plantear una nueva propuesta".

-¿Por qué gay y no homosexual?
Rodríguez: "Esa fue una discusión inicial. Hay muchas palabras para poder definir una postura de la vida, pero creo que lo gay engloba todo un planeta. Gay, más allá de ser hombre o mujer, es toda una postura de vivir, no sólo la sexualidad. Es una palabra pequeña.

No es un negocio
-¿Los fines financieros?
Novo: "Lo que menos tiene son objetivos financieros. El hecho de arriesgarse a crear este festival implica ajustes en los precios, pero se trata de organizar más festivales. No es un negocio y está surgiendo del trabajo de un equipo que se caracteriza por su entrega. Traemos la Muestra de Barcelona y después, cada año, traerá diversas producciones. Lo mismo haré yo, de llevar propuestas a la ciudad española.
"En el caso de las obras de teatro, los horarios serán en la tarde, desde las 16 horas, en La Gruta del Centro Cultural Helénico. En Contempo Cinema iniciaremos a las 12:30."

Novo anunció que su empresa planea participar en la producción de un largometraje y una obra de teatro. "Buscaremos patrocinios; claro, no contamos con el presupuesto de empresas como Ocesa."
Legorreta: "Es el primer festival en su tipo, de cine y teatro gay, en México".

Para mayores informes: Contempo Cinema, Londres 161, Zona Rosa, entre Florencia y Amberes. Teléfonos: 5208-4044 y 4488.

miércoles, enero 25, 2006

"...la mayoría de los viajes tiene un aspecto de iniciación y en ellos siempre hay un "barquero" que dirigirá los seuños. El viajero a menudo parte tras las huellas de otro que algunas veces, ha dejado algún relato. Viajar es leer lo que los predecesores han escrito para identificarse con ellos."

Jean Franco. La vuelta de Verne en 12 escalas.

lunes, enero 23, 2006

Flor.

Se eu pudesse dar um toque em meu destino,
ñao seria un peregrino
nesse inmenso mundo cao...
Se pudesse tocar em meu destino,
hoje eu seria alguém.
Seria eu um intelectualm mas como ñao
tive sorte de ter estudiado num colegio legal,
hoje me chaman pivete,
mas nunca me daram apoio moral.
Se eu pudesse ñao seria um problema social.

Fragmento de Flor. Neguinho da beijo.

Lonely Stranger.

I was born with a raging thirst
a hunger to be free
but i've learned through the years,
don't encourage me.

When i walk, stay behind,
don't get close to me
'cause it's sure to end in tears,
juste le me be.

Some will say that i'm no good,
maybe i agree.
Takke a look, then walk away
that's al'right with me...

Eric Clapton. Lonely Stranger.

jueves, enero 12, 2006

Al fin estoy instalado en casa, me mantuve en un prolongado viaje por el sureste y después a mi natal puerto jaibo. El regreso a mi punto de origen en este momento de mi vida fué altamente enrriquecedor. Reafirmé lazos familiares y amistosos con nuevas personas que en este momento se están ganando mi admiración y mi cariño.
La cantidad de historias que escuché en este peregrinaje en el mes de diciembre y enero me han dejado maravillado, atemorizado, inspirado, emocionado. Me sorprende la cantidad de formas de ser, los detalles que hacen únicos y valiosas a cada una de las personas que me permitieron asomarme en sus vidas, sumergiéndome en las profundidades de sus líquidos sueños, deseos, actitudes y formas de ser.
Termino esta primera fase de los viajes agendados (restan otros tres) con un buen sabor de boca. gracias de antemano a quienes leen estas líneas y que se saben, son cercanos a mi vida desde el momento en el que vencieron sus zonas de seguridad y conversaron, invirtieron su tiempo en este idealista empedernido.
Me enstusiasma el festival de son jarocho en Tlacotalpa, por muchos años las circunstancias no me habían permitido hacerlo, y no quisiera ufanarme, pero creo que este año es el decisivo.
Una vez más Tampico me atrapó. Me preguntaban porqué tanta conexión con una ciudad aparentemente simple, creo que tiene que ver con el hecho de haer nacido allá. Mi cordón umbilical urbanista se siente muy ligado aún.
Tengo que agradecer las bondades y los malos ratos de todas las personas que he conocido en este lapzo de tiempo. Me ayudaron a crecer, y para eso no tengo nada que ofrecerles a cambio mas que mi humilde agradecimiento.
Los huaxtecos solemos entender que cuando decimos gracias, estamos queriendo expresar que con nada del mundo podemos saldar las bondades recibidas, sea pues esta mi forma de retribuir lo mucho que me han dejado.
Nuevas amistades, nuevos proyectos, nuevos bríos, nuevos sueños. El aire se respira diferente.

viernes, enero 06, 2006

Hay días.

Hay días en que amamos estar vivos
días en que hay algo
o alguien
que nos hace este mundo respirable
días en que el sol es una mano amiga
que siembra luces en tu cuerpo
y en ocasiones acaricia tu espalda
y te dá palmaditas de calor.
Hay días en que todo tus sueños
-dulces palomas del alba-
le dan sentido a tu diario vivir
le hacen cosquillitas a tu espíritu
llenan de luz tu desolado corazón.
Pero también hay días en que la vida
te muestra un nuevo rostro:
entonces la haces tuya
porque aprendes a amarla
y la comprendes
y no la dejas que huya
sin antes cobijarla en tu regazo.
Socorro Trejo Sirvent.